El Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe analizó la evolución de los precios de los commodities entre el año 2006 hasta noviembre de 2016 y en particular de aquéllos de origen agropecuarios y energéticos.

Como marco general, el estudio indica que en este milenio, la utilización de productos agrícolas como insumo para la producción de  combustibles renovables se fue incrementando sustancialmente, generando así una mayor relación entre las variaciones de precios de ambos grupos de productos, a través de la mejora en la posibilidad de sustitución del petróleo por biodiesel y bioetanol. 

En este caso -continúa el trabajo-, el alza en los precios de los combustibles derivados del petróleo es un incentivo para que los productores de biocombustible incrementen su producción, lo que lleva a un aumento de la demanda de productos agrícolas con los que se realizan, y provoca presiones alcistas en los precios de estos últimos.

A su vez, el incremento de la oferta de biocombustibles puede verse atenuado por el aumento paralelo de los precios de los productos que se utilizan como insumo, haciendo que los resultados globales sobre los mercados de commodities dependan del alza de los precios de los combustibles en relación con el incremento del costo total de la producción del agro.

El trabajo señala que en general, se ha detectado una elevada correlación entre los dos grupos de productos, lo cual hace que sea preciso tener en cuenta la evolución del precio de los commodities energéticos, máxime al considerar la estructura actual de la balanza comercial argentina de los últimos años, en la que han ido ganando peso las importaciones de combustibles y energía.

A pesar del marco conceptual expuesto, en los últimos tres años, se ha observado una menor correlación entre el índice de precios de los commodities energéticos y los alimenticios. En este lapso de tiempo, los precios internacionales de estos últimos se mantuvieron mucho más estables y elevados que los energéticos.

“Este hecho - remarca el Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa- es favorable para la Argentina, dado que el país exporta productos del agro y es importador neto de energía a partir de 2011”.