Invitado por la Mesa Directiva de la Bolsa de Comercio de Santa Fe disertó anoche, en el transcurso de la cena mensual del Directorio de la institución, el Dr. Walter Agosto, ex ministro de Hacienda de la provincia y ex diputado nacional por Santa Fe. Actualmente, entre otras actividades, se desempeña como investigador principal del CIPPEC.

Fue recibido por el presidente de la Bolsa, Ing. Olegario Tejedor, quien estuvo acompañado por los vicepresidentes primero y segundo, Dr. Gustavo Vittori y Melchor Amor Arranz, respectivamente; el secretario y prosecretario, señor Reinaldo Avilé y escribano Martín Vigo Lamas, respectivamente y el tesorero, CPN Luis Puig. Asimismo, por el gerente general de la Bolsa, Lic. Germán Dobler; por la directora del Centro de Estudios y Servicios, Lic. Lucrecia D’Jorge, y representantes del Programa Nuevos Dirigentes, además de los presidente de las Cámaras adheridas asistentes.

Fue presentado por el Ing. Tejedor, quien dio lectura a su curriculum académico.

El Dr. Agosto realizó un análisis general de las proyecciones macroeconómicas sobre las cuales se escribió el proyecto de presupuesto nacional 2017, y se refirió al resultado financiero proyectado en presupuesto de la provincia de Santa Fe para igual período.

Consideró el 2016 como un año de transición y señaló que el “gobierno nacional había apostado a la gradualidad fiscal” y que había cambiado “su lógica fiscal, no teniendo gran premura en la reducción del déficit” 

En su informe de 40 minutos apoyado con filmillas antes los presidentes de las Cámaras adheridas a la Bolsa, entre otras, inmobiliarias, de comercio exterior, de turismo, materiales de construcción, publicidad, aseguradoras y CARSFE, el Dr. Agosto sostuvo que la Argentina va a tener financiamiento de los mercados para cubrir las necesidades de endeudamiento, pero que será a un costo más elevados. “La deuda pública es muy sensible a los movimientos de los tipos de cambio y al movimiento de las tasas de interés”, consignó en un momento de la exposición en la que mencionó, además, como un elemento que modifica un escenario trazado, el acceso de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos. Alertó, asimismo, sobre el “descalce de monedas”, que a su juicio generaba “luces amarillas” en el panorama nacional.

Efectuó una descripción del gasto público de la Argentina, del que participa la Nación con un 56%; el conjunto de las provincias con el 36%, correspondiéndole el 8% los municipios del país.

En este sentido, recordó, que “la Caja es una sola” y que el gobierno nacional estaba asistiendo a las provincias con “adelantos en la coparticipación”. Explicó que se trata de “préstamos de corto plazo, que al no poder ser devueltos por la provincias terminarán consolidándose como deuda. Habló, asimismo, de la reinstalación de reglas de responsabilidad fiscal, (estaban suspendidas desde 2008), mediante las cuales el gobierno busca que las provincias disminuyan un 10% su déficit.

“Las provincias que no tienen déficit pueden endeudarse en los mercados para la realización de obra pública, en tanto aquéllas que si lo tienen, también pueden endeudarse pero con esa reducción del 10% sobre su déficit”, comentó.

Al igual que los presentes, coincidió que había que generar más puestos de trabajo en el sector privado.

A modo de comentario final sostuvo que con el acceso del gobierno del presidente Macri, se registró “un cambio de régimen económico y ésta es la principal ventaja porque se revertió una situación que no era sostenible. La tasa de interés de la economía comparada con la inflación, dejó de ser negativa para pasar a ser positiva”, consignó.

Luego, durante la cena, se estableció un diálogo entre los presentes y el orador en que se continuaron analizando los niveles de inversión, las dificultades para que ésta se materialice por encima de las actuales tasas, los niveles de consumo, el tipo de cambio, y la relación con las provincias.