Se concretaron los pronósticos con precipitaciones de variada intensidad y registros pluviométricos superiores a 200 milímetros en el departamento San Jerónimo.
Para el período comprendido entre el 2 y 8 de marzo de 2016, los pronósticos prevén desde el comienzo hasta el domingo 6, inestabilidad climática, alternancia de días soleados, seminublados y cubiertos, precipitaciones con montos pluviométricos de realtiva importancia en áreas puntuales, con mayor incidencia en los departamentos del sur de la región, particularmente en Castellanos, La Capital y San Jerónimo. Temperaturas de medias a altas en constante ascenso, con una máxima superior a 34ºC.
Esta situación generaría nuevos escenarios, que sumado a las precipitaciones registradas durante la semana, provocarían nuevos inconvenientes en el desarrollo de las actividades agrícolas.

El 90% de lo implantado presentó un estado de \"muy bueno\" a \"excelente\", llegando al final del período de llenado de grano sin inconvenientes; un 4% se encuentra de \"bueno\" a \"muy bueno\" y el 6% restante de \"bueno\" a \"regular\".
Como consecuencia del período húmedo de febrero, se evaluó que el 0,4% del área sembrada (unas 3.500 hectáreas), principalmente en posiciones topográficas bajas, con altos riesgos de encharcamientos, se encuentra en una situación irreversible.
Se han continuado las tareas de monitoreo y seguimiento de los cultivos, condicionada por la falta de piso y accesibilidad a los lotes, para alertar y/o definir estrategias de control, en particular aplicaciones de insecticidas y fungicidas, dice el informe que semalmente difunden la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción.

Un 35 a 40% de la superficie implantada presentó lotes con problemas de crecimiento, variados estados fenológicos, áreas con suelos desnudos o cobertura escasa y otras, con agua en superficie (encharcamientos) y plantas muertas.
En la zona definida por el departamentos San Martín y San Jerónimo; y el sur de los departamentos Castellanos, Las Colonias y La Capital es la que presentó cultivares con un mejor y óptimo desarrollo, diferenciándose de las características mencionadas en el párrafo anterior.

Se ha cosechado el 72% del área sembrada, es decir unas 38.520 hectáreas, particularmente en las zonas altas.
Se ha observado vuelco y caída de plantas, lotes con agua, altos porcentajes de humedad de grano en espiga, falta de piso y en general, accesos muy complicados a los lotes.
El seguimiento de un fin de ciclo con eventos climáticos de importancia y un mes de febrero muy húmedo, permitió evaluar su impacto, con pérdidas hasta ahora, del orden de 759 a 800 hectáreas de maíz de primera con destino a grano comercial.
A pesar de ello se mantienen los rendimientos promedios estimados: para los departamentos del sur de la región, 100 qq/Ha; para los del centro entre 85 y 90 qq/Ha, y para los departamentos del norte, entre 70 y 85 qq/Ha.
Se estima que el rendimiento promedio de la campaña será estará entre los 85 y 87 qq/Ha.

Se observa uniformidad de lotes y un comienzo de floración con muy buena disonibilidad de agua útil en los suelos

Se ha cosechado el 20% del área sembrada, con un avance intersemanal de 7 puntos, lo que representó unas 7.600 hectáreas. Los rendimientos se sostuvieron en 6.000 kg/Ha. Se trata de la cosecha de los lotes sembrados en octubre, que tuvieron un ciclo evolutivo con buenas condiciones de radiación solar y temperaturas adecuadas.
Las posteriores siembras actualmente se encuentran en estado fenológico de encañado, diferenciación, floración y llenado de granos.
Se han continuado con los tratamientos contra la chinche del tallo y del grano.

Hubo una respuesta favorable de los cultivos ante las sucesivas lluvias que en la zona norte fueron de poca importancia. El estado general de los algodonales es bueno.

A pocos días de iniciado el proceso de cosecha que evidencia cierto ritmo y continuidad, aparecieron tres condicionantes de peso: la humedad de grano, la falta de piso en el lote y de accesibilidad al mismo.
Buen crecimiento y desarrollo, uniformidad de lotes, buena estructura de las plantas yespigas, fueron las características que reunieron los cultivares para que en el futuro, se realice el picado-embolsado para autoconsumo en las cuencas lecheras.