Invitado por la BCSF, el 19 de septiembre, el director ejecutivo de la Asociación de Semilleros Argentinos, Alfredo Paseyro, mantuvo una charla con representantes del sector cerealista y cooperativas de la institución.

Estuvo orientada a los consensos por alcanzar para contar con una nueva ley nacional de Semillas; las novedades sobre el estado parlamentario del proyecto de ley de Fomento a la Inversión; a la condición climática que afecta la producción de semillas y el uso refugio en cultivo Bt maíz, entre otros puntos.

La Asociación nuclea a 80 empresas con distintos perfiles. La industria semillera argentina genera 25.000 empleos directos e indirectos y toda la cadena, unos 100.000. La contante en el sector es la innovación, con agregado de valor.

El señor Paseyro fue recibido por los vicepresidentes 1° y 2°, Dr. Juan Pablo Durando y señor Ulises Mendoza.

Del encuentro participaron: la directora Analía Gaviglio; el presidente y gerente de la Cámara Arbitral de Cereales, Oscar Ravasio y Mauricio Katz; y por ACA, Alfredo González, Mauro Maturana y Agustín Sosa.

Asimismo, por Oscar Vignatti, por la Cooperativa San Justo, y Santiago Roldán, por la Cooperativa Guillermo Lehmann; y Fabián Sánchez y Rubén Agretti, de la Unión Agrícola de Avellaneda.

Algunos puntos

El señor Paseyro comenzó señalando que cuando se hablaba de una nueva ley de semillas, enseguida aparecía el tema de la soja y de Monsanto, cuando “en realidad -dijo-, la intención era mostrar la importancia de la industria semillera argentina, que nos debe llenar de orgullo”.

Remarcó que la actual ley de Semilla fue sancionada hace 50 años.

La industria ha podido adquirir tecnología extranjera pero también generar la propia como las semillas HB4.

Consignó que siempre el sector trabajó de manera de preservar el recurso suelo y el medio ambiente, y que “el desafío era continuar siendo una industria de innovación, con agregado de valor”. Pero -aclaró- que la innovación requería “armonizaciones regionales y globales”.

Acompañado de filminas, desarrolló aspectos de la Resolución Nacional 37/22 referida al “Sistema de rastreo y testeo de grado en el primer punto de entrega” e insistió en la necesidad “de alcanzar acuerdos en toda la cadena y un cambio de cultura, en el que la innovación y la ciencia sean posible”. “Debe darse un contrato tecnológico en el sector”, puntualizó.

En este punto hizo la comparación con Brasil y su adelanto, en los últimos años, respecto de la Argentina. Sobre el particular, se abrió un intercambio entre los presentes.

Un tema de compartida preocupación fue la falta de lluvias, que entre otras consecuencias condiciona la producción de semillas. “No hubo semillas de girasol y hay pocas de maíz y se van a tener con las de trigo”, se coincidió. Paseyro en este punto, recomendó “pensar y planificar”, por parte de los productores.

En la parte final de la reunión de 45 minutos, se hizo una presentación del grupo “Sembrá evolución”.

Se trata de una nueva herramienta para los agricultores, que les permitirá el acceso a todas las variedades de soja que incorporan tecnología “Enlist” de cada semillero, entre lo que se encuentra: Bioceres, Brevant, Don Mario, Illinois, Macro Seed, Nidera, Neogen, NK, Pioneer y Stine.

Durante su estadía en Santa Fe, en la sede de la BCSF, el director ejecutivo de Semilleros Argentinos mantuvo reuniones con funcionarios provinciales de las áreas de Medio Ambiente y Ciencia y Tecnología, y de la UNL y, posteriormente, se reunió con la Dra. Raquel Chan, en el Instituto de Agrobiotecnología del Conicet.

Asimismo, compartió una cena con dirigentes de ACA.