El licenciado en Economía y analista de mercados, Carlos Seggiaro, disertó en forma virtual, en el marco del Congreso Internacional de la Cámara Industrial de Extrusado y Prensado de Santa Fe.

El orador, además de ejercer su profesión, se desempeña como director del Banco de Córdoba.  La charla fue presentada por el presidente del CIDEP, señor Sergio Bernardi.

Partió de un análisis del comportamiento desde febrero-marzo, de los valores promedio de 25 commodities a nivel global y sostuvo que, luego del derrumbe de los precios por la pandemia, en el mes de mayo, éstos comenzaron a recuperarse.  Aclaro que esto se daba en un marco de gran incertidumbre, con una tasa de interés norteamericana prácticamente en cero, y el debilitamiento del dólar frente a monedas como el euro y el yuan. El movimiento de los precios en todos los commodities fue en ascenso.

Habló de tres factores: una recuperación de la demanda mundial; el cambio de posición de los Fondos de Inversión, y el clima. Este último factor observado en el Hemisferio Norte y por las proyecciones de lo que está ocurriendo en América de Sur, en países como Brasil y la Argentina.

Sostuvo que desde la perspectiva local, este cuadro de situación favorecía la recuperación de los precios para la producción del país, aclarando de inmediato, que no se trataba del viento de cola observado en los años 2004 y 2005.

Consideró que la caía del PBI en la Argentina estará entre el 12 y 13%, siendo la más pronunciada de su historia. Remarcó que al país, “la pandemia lo encontró mal parado por los dos años previos de recesión. Argentina comenzó a caer en 2017 y para que recupere el nivel de actividad de ese año, van a pasar tres o cuatro años, con diferencias sectoriales notables”, puntualizó.

Explicó que el gobierno había apelado a “una fuerte expansión del gasto público” para hacer frente a la pandemia y que si bien el proyecto de presupuesto 2021 prevé una reducción parcial, “el déficit seguirá siendo muy fuerte: 4,5% del PBI”. “Estamos hablando de 1,7 billones de pesos”, agregó. “A ese déficit, el ministro de Economía lo estima financiar en un 40% con emisión de bonos y un 60% con emisión monetaria”.

Seggiaro considera que la Argentina tendrá un escenario de aceleración de la inflación superior a la de 2020. “Para nosotros, un 40% de inflación será el piso”, consignó.

Respecto del tipo de cambio, en el que el dólar oficial se ubicó en el día, en 83 pesos, el orador indicó que los mercados y empresas esperan “un golpe devaluatorio”, pero -apuntó-   “el gobierno irá moviendo el valor del dólar en sintonía con la inflación, pero no convalidará un golpe devaluatorio”.

A su entender, a fin de año, el dólar oficial se ubicará “en 90 pesos o un poco más; pero no va a valer 130-140 pesos, y el cepo va a continuar”.

Sostuvo a continuación, que las medidas tomadas por el Banco Central de la República Argentina en la última quincena buscan “tender un puente al segundo trimestre del año 2021”. “A partir de allí, se irá normalizando el tipo de cambio”, sostuvo el orador. Y en el mientras tanto, el BCSR irá utilizando las distintas “ventanas disponibles” como el swap de China. Remarcó que el BCRA contaba con una serie de ventanas para evitar un golpe devaluatorio.

Luego el disertante se refirió a los precios de algunos productos que integran la canasta de producción nacional. Habló de la recuperación del precio de la carne porcina y de los lácteos, entre otros.

Respecto de los lácteos, a nivel industrial, consideró que los costos de producción “subirán en una proporción mayor que los precios de venta”, por lo que la industria láctea verá reducida su rentabilidad y trasladará su situación a todos los eslabones de la cadena y al productor.

El orador consideró que persistirá el cepo y la alta presión impositiva pero que no veía al gobierno intención de un atraso cambiario por las necesidades de exportar. En cuanto al sector financiero indicó que las tasas serán negativas respecto de la inflación.

Informó que el Banco de Córdoba estaba negociando con el ministro de la Producción nacional, Matías Kulfas, créditos a tasa subsidiada del 10%, para los proyectos de inversión en la cadena de valor. Agregó que seguramente, la provincia de Santa Fe también lo estaría gestionando.

Una de las alternativas de producción que planteó al final de la disertación virtual, fue la producción de alimentos balanceados para peces, con la intención de exportarlos al sudeste asiático. Otra posibilidad son las harinas micronizadas, agregó, para terminar diciendo que existía “una batería de opciones de industrialización de la producción primaria, en las cadenas agroalimentarias; que son opciones para analizar”. Recalcó la necesidad de Argentina de industrializar su producción para exportarla.