Semana con días de estabilidad climática, soleados, con altas temperaturas y porcentajes de humedad medios a bajos. Los pronósticos del paso de un frente de tormenta se concretaron, en particular en el oeste del área de estudio.
Se registraron precipitaciones de diversas intensidades, cuyos montos pluviométricos fluctuaron entre 02 a 25 mm.
En el resto del área no hubo lluvias, pero si ráfagas de vientos de diversas direcciones: sur, sur-oeste y descenso de las temperaturas.
Estas características ambientales, produjeron intensos procesos de evaporación – evapotranspiración, una mayor demanda de agua de los cultivos y como consecuencia, la disminución de los suelos con sectores encharcado – anegados.
Por otro lado, el desarrollo de las actividades fue normal, siendo las más relevantes: siembra, cosecha y seguimiento de los cultivos.
En siembra: los movimientos de los equipos y sembradoras estuvieron muy condicionados por los estados de los suelos y las superficies implantadas de cultivos de arroz, algodón, sorgo granífero, forrajero, soja tardía y maíz tardío (de segunda), según sectores, fueron variables.
En cosecha: en el departamento General Obligado al normalizarse las condiciones de piso, el proceso de recolección del girasol, incrementó su ritmo, lográndose un grado de avance del 35 %.
A la fecha del informe, se llevaban cosechadas 108.500 hectáreas de girasol, el 13% del área sembrada. Asimismo, se llevan sembradas 98.000 ha de maíz temprano; 29.850 ha de arroz; 51.500 ha de algodón; 52.190 ha de sorgo granífero; 897.500 ha de soja de primera; 495.000 ha de soja de segunda y 52.800 ha de maíz tardío.

Con el transcurso de los días mejoraron las condiciones de piso y con ello el proceso de cosecha incrementó su ritmo. En el departamento General Obligado fue donde se observó el mayor movimiento de equipos y cosechadoras.
Con un grado de avance del 35 %, los rendimientos promedios obtenidos fueron desde mínimos de 14 qq/ha, a máximos de 28 qq/ha con lotes puntuales de 30 qq/ha, considerados buenos por el sector productivo.
Un 93 % del cultivo implantado se encontró en estado bueno a muy bueno, con algunos lotes excelentes, un 5 % en estado bueno a levemente regular y un 2 % en estado regular a malo.
Los cultivares se detectaron en muy buen estado sanitario, no presentándose inconvenientes de patógenos ni de insectos, pero continuaron los ataques de palomas y cotorras, ya enunciados, en varios informes anteriores.

Continuaron siendo óptimas a ideales las condiciones ambientales para los cultivares. Las temperaturas medias a altas y los estados fenológicos del cultivo hicieron que los sembradíos aumenten la demanda de agua útil de los suelos.
El 95 % del cultivo se encuentra en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes, un 3 % en estado regular y un 2 % en estado malo.
La variación en los porcentajes estuvo originada por algunos indicadores: los excesos hídricos que provocaron la mortandad de plantas en áreas de encharcamiento – anegamientos, inconvenientes en el llenado completo de las mazorcas y a los ataques de cotorras en los sectores perimetrales de los lotes.
La sanidad detectada fue buena, sin manifestaciones de ataques de enfermadades ni de plagas.
En el departamento Castellanos, en sectores de influencia de las cuencas lecheras, muy puntualmente, comenzó el proceso de picado – embolsado, con muy buenos resultados en calidad y en cantidad.

Zona este: semana con condiciones ambientales muy buenas para el algodón, con suficiente humedad del suelo y temperaturas diarias adecuadas.
El estado del cultivo siguió siendo muy bueno en los lotes sembrados en fechas tempranas, con adecuado stand de plantas y buen control de malezas.
En cuanto a los lotes sembrados más tarde, el stand de plantas que se observó no fue el adecuado, dado que las malezas avanzaron complicando el estado de los cultivos. Se realizaron fumigaciones para el control de las mismas.
En esta última semana se observó un ataque generalizado de orugas, (spodoptera) en el cultivo, por lo que se realizaron aplicaciones de control.
En los lotes donde el cultivo comenzó la floración, las trampas no serían efectivas para la atracción de los picudos, que serían atraídos por las mismas flores, monitoreándose posibles ataques en los pimpollos y evaluándose los daños.
Zona oeste: el área presentó dos escenarios al igual que la zona este, los lotes sembrados en primera instancia y los sembrados recientemente. Siendo éstos últimos los que presentaron algunos inconvenientes reflejados en cierto grado de enmalezamiento de los lotes, disminución del stand de plantas, problemas de germinación y no uniformidad en los predios.

Ante las condiciones ambientales enunciadas, los cultivares continuaron su crecimiento y desarrollo foliar con normalidad, buena estructura de plantas y en un alto porcentaje de los mismos ya han cerrado surco, sin problemas, observándose en general, estado bueno a muy bueno. La situación sanitaria detectada fue buena a muy buena.
Asimismo, comenzaron las actividades de seguimiento y monitoreo, las que irían en aumento en la medida que se aproximen los estados en floración y fructificación.

El proceso de siembra presentó un grado de avance del 90 %, aproximadamente unas 495.000 ha de las 550.000 ha previstas inicialmente, con un retraso de 2 puntos, en comparación con similar período, de la campaña pasada.
A medida que las condiciones de la cama de siembra se optimizaron, la misma, fue aumentando su ritmo.
Se continuó con las aplicaciones de herbicidas pre-emergentes, para un buen control de malezas.
En un primer relevamiento de los cultivos en los departamentos del centro del área, se detectó que algunos presentaron pequeños inconvenientes en la germinación, quedando espacios sin plantas, disminuyendo así, su stand por metro lineal.