La semana comprendida entre el 9 y 15 de octubre de 2019, se caracterizó por haber tenido un comienzo de días soleados y un progresivo aumento de las temperaturas medias diarias, que alcanzaron máximas de 40 ºC, con vientos del sector norte, generando condiciones agobiantes que impactaron en los cultivos y provocaron una mayor demanda de humedad.
Luego de tales escenarios, el ingreso de un frente de tormenta generó inestabilidad climática con precipitaciones de variadas intensidades y distribución geográfica. A posteriori, se sucedieron días de lloviznas, con marcado descenso de las temperaturas y vientos de variadas direcciones, preferentemente del sector sur, dice el informe de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
Los departamentos del sur del área de estudio, San Martín y San Jerónimo, fueron los más beneficiados en la cuantía de los mm de agua caída, con un acumulado que fluctuó entre 55 y 125 mm en todo el período de inestabilidad, (8 h 09/10 hasta las 20 h del 15/10), con montos inferiores, entre 30 y 70 mm los departamentos del norte, Nueve de Julio, Vera y General Obligado y en el sector central del área de estudio fue donde se registraron los menores montos pluviométricos, los que giraron entre 05 y 45 mm.
Los movimientos de equipos y sembradoras del cultivo de girasol, maíz temprano (de primera), arroz y algodón tuvieron diferentes ritmos, progresando en los distintos departamentos, a medida que las condiciones en la cama de siembra lo posibilitaron.

Un 92 % del cultivo se detectó en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes, un 5 % en estado bueno a levemente regular y un 3 % en estado regular. Las nuevas precipitaciones y las condiciones climáticas que se registraron en la semana en todos los departamentos del centro – norte santafesino, fueron sosteniendo y fortaleciendo los distintos estados de los trigales que se desarrollaron sin inconvenientes, con un fuerte decaimiento de la presión de enfermedades foliares.
Continuó el monitoreo de los cultivares, centrado en las plagas, principalmente la presencia de pulgones, cuyo número fue muy bajo, como consecuencia de las condiciones ambientales que imperaron en la semana.

El proceso de siembra en el área centro norte santafesino, logró un grado de avance del orden del 96 %, un incremento intersemanal de 3 puntos y  un retraso de 4 puntos en comparación con la campaña del año anterior, para similar período.

Las nuevas precipitaciones e inestabilidad climática que reinaron durante tres días de la semana, detuvieron y rantelizaron la siembra de los últimos lotes, quedando un pequeño porcentaje, que de acuerdo a la evolución del clima se sembraría o no, porque estaría muy al límite de su fecha óptima de siembra, aumentando los riesgos productivos.

 

Las condiciones ambientales citadas, favorecieron el muy buen crecimiento, desarrollo de las plantas y el proceso de germinación de los últimos lotes implantados. Hasta la fecha, se mantuvo un muy estado sanitario en los cultivares, no presentando inconvenientes y sin la presencia de patógenos o de insectos.

El grado de avance en el proceso de siembra que se observó fue del orden del 95 %, con un incremento de 7 puntos intersemanal y 5 puntos inferior a la campaña del año anterior.

Las condiciones de humedad y temperatura en la cama de siembra fueron permitiendo que la actividad tuviera un ritmo normal en la totalidad del área de estudio, pero el ingreso de un frente de tormenta, inestabilidad con precipitaciones condicionaron y detuvieron la mismo.

Por otro lado, dichas lluvias brindaron condiciones óptimas para una muy buena germinación y emergencia de los últimos lotes sembrados, reforzando las condiciones para un buen crecimiento y desarrollo.
Los maizales presentaron de buen a muy buen estado, óptimo stand de plantas, sin inconvenientes, al igual que su estado sanitario.

Con las precipitaciones de la semana pasada, se inició la siembra de algodón en la zona este de la provincia de Santa Fe. La que avanzó hasta mitad de semana, luego se detuvo por las precipitaciones e inestabilidad climática.

Dichas condiciones beneficiaron a los primeros lotes sembrados, los que evidenciaron una germinación y emergencia normal, sin inconvenientes. Pero, los  últimos predios sembrados, en algunos lotes puntuales, en un bajo porcentaje, la germinación y emergencia del cultivo se vio afectada por las baja temperaturas que reinaron.

De acuerdo a las condiciones imperantes, la situación del sector y los aspectos comerciales al inicio de un nuevo ciclo, se estimó un incremento en la intención de siembra del orden del 5 a 6 %, en comparación a la superficie implantada en la campaña anterior, que fue de 50.820 ha.

Continuó el monitoreo de las trampas en los predios destinados a algodón, como así también la prevención del ingreso del picudo al lote, realizándose las aplicaciones en los bordes, en caso de necesidad.