Semana con estabilidad climática, con cinco días soleados, nubosidad variable, humedad ambiente y temperaturas medias diarias elevadas, que generaron condiciones ambientales agobiantes.
Se registró un nuevo frente de tormenta, que se hizo presente con eventos de importancia: precipitaciones, caída de granizo, ráfagas de viento, con mayor impacto en sectores del departamento Castellanos y San Javier, con voladuras de techos y destrozos en infraestructura y maquinarias, dice el informe que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
Las precipitaciones registradas fueron de variadas intensidades, en sectores puntuales de media a alta intensidad en poca unidad de tiempo y con montos pluviométricos de relativa importancia, los cuales fluctuaron entre 10 a 60 mm registrándose en todos los departamentos del área de estudio. Los perfiles de los suelos se encontraron con muy buena carga de agua y disponibilidad para el período de mayor demanda, aunque se mantuvieron encharcadas y anegadas las áreas más bajas y deprimidas.
Se completó la siembra del maíz con 184.500 hectáreas. El número final es menor menor a la intención de siembra que fue de 194.000 hectáreas.

Las condiciones ambientales de la semana, permitieron un normal desarrollo, comienzo y progreso de los estados reproductivos, bajo muy buenas a excelentes condiciones, con muy buena disponibilidad de agua útil, temperaturas medias diarias y horas de sol.
Los cultivares se mantienen en un 80 % en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes, un 8 % en estado bueno a regular y el 12 % restante, en estado regular a malo, manifestando el impacto y los inconvenientes ya mencionados, especialmente en las áreas deprimidas y bajas topográficamente.
Se realizaron los controles para chinches en la mayoría de las parcelas.

Fue amplio el cuadro de situación de los cultivares que se desarrollaron en la campaña; el cultivo siguió creciendo y los dos escenarios detectados fueron los siguientes:
a) con consecuencias e impactos de importancia, por el período húmedo, con retraso de la fecha de siembra, poco desarrollo de estructura de plantas, heterogeneidad e irregularidad de los lotes, mortandad y baja densidad de plantas.
b) con bajo a nulos indicadores de los eventos climáticos, observándose muy buen desarrollo, homogeneidad, uniformidad de lotes y buenas estructuras de plantas.
Se continuó realizando el control de malezas, pero todo regulado por las condiciones climáticas, de piso de los lotes y su accesibilidad.
El seguimiento y monitoreo de las parcelas no se detuvo, la observación de insectos hizo que las aplicaciones para control se realizaran de inmediato y así su incidencia sea muy baja a nula.

Finalizó la siembra de maíz, cuyo proceso sufrió una prolongación en el final de la misma, particularmente el maíz tardío (de segunda), más de lo esperado.
Para la campaña se estimó una superficie sembrada de 184.500 ha. De ellas, unas 89.000 ha correspondieron a los lotes sembrados en primera instancia, denominado maíz de primera, el cual de acuerdo al área de estudio tendría dos usos, un porcentaje a grano para futura venta comercial y el otro porcentaje como forraje, para consumo animal bovino.
Otras 95.500 ha correspondieron a las parcelas sembradas en segunda instancia, denominado maíz de segunda o tardío. Los productores procedieron a la siembra de los últimos lotes aun conociendo que la fecha no sería la óptima, pero optaron por ella, para que no quede el suelo improductivo.
Con el paso del frente de tormenta y las precipitaciones registradas, se complicaron aún más los sectores que se habían resembrado, en áreas deprimidas, volviéndose a encharcarse y anegarse.

La actividad del picado de cultivares de maíz temprano, en el área de influencia de las cuencas lecheras en los diferentes departamentos, llegó su fin.
Los rendimientos se mantuvieron con muy buenos resultados en cuanto a calidad y cantidad, con un leve aumento, cerrando en valores promedios de 13,5 a 14 metros bolsa/ha, con máximos excepcionales en lotes que rindieron 18 metros bolsa/ha, en el departamento Castellanos.
Los cultivares con destino a grano comercial, un 93 %, presentaron un muy buen estado a excelente y el 7 % restante regular, consecuencia de los grados de impacto de los sucesivos eventos registrados en los distintos departamentos.
En cuanto al estado sanitario del cultivo se encontró muy bien, sin ataques de plagas ni enfermedades, hasta el momento.
Con el transcurso de los días, lentamente, se fue generalizando el proceso de cosecha en todos los departamentos, a ritmo lento y regulado por las condiciones ambientales, en particular la humedad de grano, que todavía se encontró con valores altos y sólo con valores medios, en casos puntuales.
• Departamentos General Obligado y Vera en lotes con cultivares más avanzados los rendimientos promedios máximos fluctuaron entre 50 - 65 qq/ha, con aumentos a la semana anterior y mínimos de 35 a 40 qq/ha.
• Departamentos San Justo, San Javier, Las Colonias, Castellanos, La Capital y San Cristóbal, con rendimientos promedios 70 - 80 a 85 qq/ha, con un máximo de 100 qq/ha.
• Departamentos San Martín y San Jerónimo, comenzarían en los próximos días, con muchas expectativas por los primeros resultados.
Se estimó que el rendimiento promedio sería de 86 a 88 qq/ha, superior en 10 a 11 qq/ha, al obtenido la campaña anterior.

El proceso de siembra finalizó habiéndo sido heterogéneo y complejo desde su comienzo, ante la variación de los diferentes y sucesivos escenarios con consecuencias y condiciones poco favorables.
El estado sanitario de los maizales, en general, es bueno.
Las aplicaciones realizadas contrarestaron los ataques del barrenador menor (Elasmopalpus lignosellus).

La estabilidad climática de una parte de la semana, permitió que el proceso de cosecha avance progresivamente a medida que las condiciones de piso y accesibilidad a los lotes lo posibilitaron. En los departamentos del norte, la recolección llegó a su fin sin variación en los rendimientos promedios ya enunciados, los cuales fueron de 12 a 15 qq/ha, con algunos lotes puntuales de 19 qq/ha.
Para el caso de los lotes con mayor grado de afectación y que fue posible el ingreso de las maquinarías, los rendimientos oscilaron entre 4 y 5 qq/ha, así también ante rindes inferiores, sólo se ingresó al lote y luego se suspendió la tarea de recolección abandonando el predio.
En los departamentos del centro y sur, quedan lotes para su recolección, en regulares condiciones y con cierto grado de enmalezamiento, condicionados por la falta de piso y el alto porcentaje de humedad de grano.

Las condiciones climáticas de la semana permitieron la continuación del proceso de cosecha a ritmo muy lento. No hubo variación en los rendimientos promedios de 5.000 kg/ha, considerados bajos, manteniéndose los mismos desde el comienzo de la trilla hasta la fecha.
Las dificultades enunciadas por el transporte del grano, empeoraron día a día, por falta de caminos y el corte para el transporte pesado de la ruta provincial Nº 1, que complicó toda estrategia y el traslado del cereal a los molinos. Situación que estaría presente durante toda la cosecha y fin de campaña.
A lo enunciado, de los resultados más bajos se sumó el paso de un frente de tormenta del lunes 11, con ráfagas de viento de importancia, con daños en infraestructuras, voladuras de techos y destrozos en maquinarias en el distrito San Javier.

En la semana se continuó con actividades similares a la semana anterior, tales como, aplicación de herbicidas, reguladores de crecimiento y de insecticidas, donde fuese necesario.
Las pérdidas por los excesos hídricos ocurridos durante el mes de enero en el área algodonera Este, fueron las siguientes:
• Departamento General Obligado, sector norte (desde distrito Villa Ocampo hasta distrito Florencia) un 20 %. En el sector centro y sur (distritos Arroyo Ceibal, Avellaneda, Malabrigo y localidades aledañas) y (distrito Romang, norte del departamento San Javier) la pérdida fue entre 2 y 7 %.
• Departamento San Javier (desde distrito Alejandra a distrito San Javier) las pérdidas fueron del 65 %.

Un 90 % de los cultivares continuaron en buen a muy buen estado, en condiciones óptimas de humedad y temperatura, con un buen desarrollo y crecimiento, sin inconvenientes ni problemas sanitarios y un 8 % se encontró afectado por los excesos hídricos, con ciertos grados de recuperación debido a las condiciones climáticas de la semana y un 2 % con consecuencias irreparables.
En las áreas de influencia de las cuencas lecheras se continuó con la realización de las tareas de picado de cultivares de sorgo, con buenos resultados en cuanto a calidad y cantidad, situación que fue interrumpida por las precipitaciones.