La semana se caracterizó por condiciones climáticas estables, con un paulatino aumento de las temperaturas, días soleados, algo ventosos, con dirección norte, que generaron situaciones ambientales buenas, óptimas para las actividades en el sector productivo y en el desarrollo de los cultivos.
Lo enunciado perduró hasta el comienzo de la tarde del día 11 del corriente. A posteriori, el avance de un frente de tormenta, con precipitaciones de variada intensidad, caída de granizo en áreas puntuales, alta nubosidad, ráfagas de viento, se manifestó en gran parte del área, hasta las 20 hs.
En los departamentos del centro-norte del área precipitaron entre 10 y 50 mm y en algunos sectores puntuales algo más de 120 mm y en los del noroeste fue donde se registraron los menores montos pluviométricos, dice el informe semanal del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.

Las tareas realizadas en este período, fueron las siguientes:
a) proceso de siembra, con finalización para los cultivos de arroz, algodón, soja de primera y continuación para los cultivos de sorgo granífero – forrajero y soja de segunda,
b) monitoreo de las trampas y de lotes donde comenzó la etapa de floración, para detección de la presencia del picudo algodonero y la realización de aplicaciones de insecticidas,
c) cosecha de trigo en los departamentos del centro y sur del área de estudio, llegando a sus últimos días,
d) aplicaciones de herbicidas para el control de malezas, particularmente en los lotes sembrados con soja de primera y algodón,
e) incorporación de fertilizantes en cultivo de algodón.

Hasta la fecha de informe, se habían sembrado, aproximadamente, 89.000 hectáreas con maíz; 28.800 ha con arroz; 850.500 ha de soja de primera; 247.500 ha de soja de segunda; 59.800 ha de algodón y 40.300 de sorgo granífero.

El proceso de siembra alcanzó su fin, con inconvenientes y problemas en última etapa.
Se logró para esta campaña una superficie sembrada de unas 850.500 ha, un 5,5 % inferior, representando unas 49.500 ha menos, que lo sembrado en la anterior.
Los cultivares sembrados en primera instancia, germinaron y se desarrollaron sin mayores inconvenientes.
Algunos lotes presentaron enmalezamientos debido a las condiciones de humedad reinante y la falta de piso para la realización de las necesarias y oportunas aplicaciones de herbicidas.
En departamentos del noreste se detectó la presencia y los daños del picudo de la soja (Sternechus pinguis), por lo que se recomienda el monitoreo de los lotes, especialmente si el año anterior estuvo presente.
Un indicador que se observó fue el irregular stand de plantas y la emergencia de las mismas; considerándose que el múmero de plantas por hectárea no fueron los óptimos, en comparación con la campaña anterior.

El proceso de siembra alcanzó un progreso del orden del 45 % sobre lo proyectado, representando unas 247.500 ha.
Se estimó una intención de siembra de unas 550.000 ha, con un incremento del 6,36 % representando unas 35.000 ha más que la intención de la campaña pasada.
Las buenas condiciones climáticas y de estabilidad, permitieron el avance de las sembradoras en un muy buen ritmo de siembra, en casi todos los departamentos del área. En tanto, sólo en el sector Oeste, parte extremo Noroeste del departamento San Cristóbal y del departamento Nueve de Julio, donde se detuvo por la falta de humedad en los primeros 3 a 5 cm de la cama de siembra.
Esta tarea se reanudaría, con el cumplimiento de los pronósticos, que prevén precipitaciones para los próximos días, en toda el área de estudio.

El cultivo de maíz presentó hasta la fecha, un avance en la siembra del 47,3 %, representando unas 89.000 ha. Corresponden a lotes sembrados en primera instancia, denominado maíz de primera, el cual de acuerdo al área de estudio tendría dos usos, un porcentaje a grano para futura venta comercial y el otro porcentaje como forraje, para consumo animal bovino.

La buena a muy buena disponibilidad de agua útil en los suelos y las temperaturas adecuadas para el cultivo, hicieron que desde sus inicios hasta el período de estados reproductivos, los maizales se desarrollaran y crecieran bajo óptimas e inmejorables condiciones.
Por ello los cultivares manisfestaron muy buen estado a excelente, en un 98 %. El 2 % restante manifestó cierto grado de impacto por los diferentes eventos ocurridos en los distintos departamentos, como caída de piedras y puntuales excesos hídricos.
En cuanto al estado sanitario del cultivo se encontró muy bien, sin ataques de plagas ni enfermedades, hasta el momento.

El proceso de cosecha prosiguió lentamente y con el transcurso de los días entró en la etapa de finalización, beneficiado por las condiciones climáticas estables y sin inconvenientes para los lotes faltantes.
En los departamentos del centro y sur, se concentró el movimiento de equipos y cosechadoras, lográndose en el total del área un 97 % de avance, restando la cosecha de unas 10.600 ha.
A continuación el SEA expone los rendimientos promedios que se obtuvieron en los departamentos: 9 de Julio, 30 qq/ha.; Vera, de 27,5; General Obligado, 27,5 qq/ha, San Cristóbal 29 ; San Justo 31; en San Javier, 23 qq/ha; en Las Colonias 34 qq/ha y en La Capital, 32 qq/Ha.
Asimismo, continúa la trilla en Castellanos con rendimientos promedios de 28 a 33 qq/ha; San Martín de 32 a 35 y San Jerónimo, 32 a 35 qq/ha.
Se mantuvo la tendencia en la disminución de los rendimientos, reflejando las consecuencias de las condiciones ambientales que afrontó el cultivo en sus últimas etapas.
Se estima un promedio final de toda el área de estudio, campaña 2018 de 32 qq/ha, con una disminución de 3 qq/ha al valor estimado al comienzo de la cosecha.

Los cultivares en un 95 % continuaron evidenciando estado bueno a muy bueno, con lotes en excelentes condiciones; un 3 % bueno a regular, con lotes puntuales regulares, por posición topográfica, la aptitud de los suelos y el 2 % restante malo, sin posibilidades de recuperación, perdido como consecuencia de las tormentas, caída de piedras y excesos hídricos, volteo, caída de plantas y muerte de las mismas.
Con una buena disponibilidad de agua útil en los suelos, el crecimiento y desarrollo de los cultivares fue normal, con muy buenas condiciones en beneficio de los cultivares, principalmente en plena floración y fin de ella, por ello el alto porcentaje de su buen estado.
El aspecto sanitario del cultivo, en general, se presentó muy bien, sin ataques de plagas, ni enfermedades hasta el momento.

El proceso de siembra en el área arrocera llegó a su fin, con ciertos inconvenientes e interrupciones por los eventos climáticos que se manifestaron.
Se cubrió la intención de siembra estimada, la cual llegó a una superficie sembrada de 32.000 ha para la campaña 2017/2018.
El estado general del cultivo no fue el mejor, dada la irregularidad climática que se registró desde mediados de noviembre hasta la fecha.
El amarilleo de muchos lotes persistió debido a las bajas temperaturas mínimas 7 grados y el lavado de nitrógeno.
El 10 % del arroz sembrado fuera de época, correría con los riesgos de los efectos de las bajas temperaturas, dados los estados fenológicos avanzados. Se siguió observando la presencia de enfermedades secundarias en hojas, (helmintosporiun y cercospora). Los cultivares se encontraron en los siguientes estados fenológicos: 3 – 4 hojas, macollaje, macollaje avanzado y principio de diferenciación.
El valor comercial del grano de arroz con cáscara, fue de $ 7,00 /kg quedando igual a la semana anterior.

Finalizó el proceso de siembra para esta campaña 2018/2019, en toda el área algodonera de la provincia de Santa Fe, el cual sobre el final tuvo ciertos inconvenientes por los excesos hídricos y la falta de piso.
La superficie sembrada para este ciclo se estimó en 59.800 ha, 1.200 ha menos que la intención de siembra que se presentó al inicio y 4.750 ha más que lo sembrado en el año anterior, para el logro de un aumento del 7,9 %.
En general la emergencia del cultivo fue buena, como así también su crecimiento y desarrollo. Ante la estabilidad climática, que se registró en la semana, continuaron realizándose las actividades necesarias para el logro de un buen cultivar, con lo cual se prosiguió con la fertilización nitrogenada del cultivo y la aplicación de herbicidas e insecticidas.

El proceso de siembra logró hasta la fecha un grado de avance del orden de 65 %, representando aproximadamente unas 40.300 ha, sobre una estimación de intención de siembra de 62.000 ha, similar a la campaña anterior.
Un 10 % menos en comparación interanual a lo sembrado en igual fecha, consecuencia de las condiciones climáticas que se registraron durante todo el mes de noviembre.